El conocimiento proporcionado por la neurociencia puede ayudar a la
escuela ya los maestros a ser más eficientes y el aprendizaje más interesante
para los estudiantes.
El aprendizaje es más eficaz cuando se estimulan todos los sentidos.
La práctica, sin duda ayuda a la memorización, pero no es suficiente como para
que toda la información se almacena.
El aprendizaje depende de la motivación. Cuando se quiere hacer que
algo suceda compromiso.
Si la actividad es apropiada, y me da un refuerzo positivo, viene el
placer y ser más práctico. Por lo tanto, la práctica conduce al desarrollo de
habilidades y competencias, pero si la actividad que se ofrece es demasiado
fácil, tenemos un reto, y si es demasiado difícil, conduce a la frustración y
abandonar.
Si el nivel de actividad no son las habilidades adecuadas, habilidades
y competencias de un individuo, no un conflicto mental que ocurre y por lo
tanto el aprendizaje.
Si la actividad es placentera, el cerebro crea expectativas y anticipa
la sensación de placer. Esto nos motiva a abandonar el lugar y actuar.
La sociedad actual quiere personas con amplia cultura global y no
profesionales que se especializan en una sola área.
La escuela actual tiene que ir más allá de la transmisión de
contenidos, la memorización de fórmulas y fechas, y sí, enseñar a los
estudiantes a movilizar sus recursos cognitivos, conocimientos, habilidades,
destrezas, información y habilidades para resolver problemas.
El aprendizaje no depende de la cantidad de estudio, pero al estudiar.
Si el estudiante no actúa e interactúa con el contenido y la información
simplemente no es el aprendizaje. El comportamiento es el resultado de la
función cerebral, o un organismo que actúa en conjunto con la mente.
En su parte de sensor, el cerebro recibe información del entorno y al
proceso, de una manera coordinada que le permite crear una imagen, es decir,
una representación sensorial del medio ambiente.
Esta imagen creada nos lleva a desarrollar una hipótesis de trabajo,
lo que significa que podemos encontrar en el medio ambiente, la identificación
de las cosas y la organización de nuestro comportamiento. Esta información va a
la zona del motor que genera el movimiento, es decir, la acción que nos saca
del lugar y actuar de cierta manera.
La parte asociativa situada en la corteza cerebral, le dará a la
complejidad de nuestro comportamiento en el tiempo que nos lleva a hacer
asociaciones con recuerdos del pasado, diseñar el futuro y crear metas y
estrategias para resolver un problema de decidir si desea o no hacer algo según
nuestros criterios y valores.
Nuestro cerebro controla todo, desde las emociones, la información
proveniente de los sentidos a las cuestiones fisiológicas. Por lo tanto, su
importancia y la necesidad de profesionales de la educación a comprender y
función del estudio del cerebro para ayudar mejor a sus estudiantes en el
proceso de enseñanza y aprendizaje.
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